Las micotoxinas, son metabolitos secundarios tóxicos producidos por hongos filamentosos que, al proliferar, contaminan los alimentos o cultivos en los que se desarrollan. Estas micotoxinas, suelen encontrarse principalmente en especias, frutos secos, cereales y derivados, café, vino, mosto, leche, cacao o hierbas aromáticas, entre otros alimentos.
Normalmente, estas sustancias se encuentran en cantidades ínfimas, pero si superan los valores máximos permitidos pueden afectar a la salud del consumidor. Por ello, estos contaminantes se encuentran legislados internacionalmente y por el Código Alimentario Argentino (C.A.A.).
En Julio de 2019, por medio de la Resolución Conjunta 22/2019, el C.A.A. ha actualizado la legislación respecto a las micotoxinas, incorporando:
DEOXINIVALENOL:
- en alimentos a base de cereales para lactantes y niños pequeños.
- en harina y sémola de maíz.
- en harina, sémola, semolina y hojuelas o copos de trigo.
OCRATOXINA A:
- en alimentos a base de cereales para lactantes y niños pequeños.
- en harina y sémola de maíz.
- en harina, sémola, semolina y hojuelas o copos de trigo.
- en café instantáneo, café tostado en granos y molido.
- en pasas de uvas.
En los últimos años. las metodologías por cromatografía líquida con detección por espectrometría de masas (HPLC-MSMS), comenzó a ser utilizada para el análisis de estos compuestos, debido a que permite identificar, en un solo análisis las micotoxinas legisladas.
CIATI ha implementado esta metodología para el análisis de las siguientes micotoxinas en diferentes alimentos.
Aflatoxina B1, B2, G1, G2.
Fumonisinas B1, B2, B3.
Ocratoxina A.
Zearalenona.
Deoxinivalenol.
Toxina T-2.
Toxina HT-2.
Alcanzando los niveles actualmente legislados por la Unión Europea (UE), la FDA, y el C.A.A., lo que permite reducir los tiempos de respuesta y disminuir sensiblemente el precio del análisis, especialmente al analizar varias micotoxinas juntas.