El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad agroalimentaria (SENASA) prohibió el uso de varios insecticidas.
Mediante Resolución 149/2018 prohíbe la importación, comercialización y uso de los principios activos Diclorvós (DDVP) y Triclorfon y de los productos formulados que los contengan, para su utilización en granos, incluidas las etapas de producción, poscosecha, transporte, manipuleo, acondicionamiento y almacenamiento, así como también en instalaciones para el almacenamiento de granos y de tabaco. Esta prohibición comienza a regir a partir de Noviembre de 2018.
Prohibición de sustancias activas
El Diclorvós es un insecticida de uso en cereales con un LMR de 5 ppm y esto genera una desventaja comercial a las exportaciones de granos argentinos ya que en la mayoría de los principales países importadores de productos argentinos las tolerancias son mucho mas bajas.
El Triclorfon es una sustancia que puede metabolizar a Diclorvos en las plantas o por biodegradación en los suelos, de modo que también aplica esta prohibición.
El 09/10/2018 se publicó en el Boletín Oficial la Resolución 263/2018 del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA) que prohíbe la elaboración, importación, y fraccionamiento de las sustancias activas Carbofuran, Carbosulfan, Diazinón, Aldicarb y Dicofol y sus productos formulados.
Esta prohibición aplica desde la fechas de publicación de la mencionada Resolución en el Boletín Oficial.
Además esta misma Resolución prohíbe, a partir de los 365 días de su entrada en vigencia, la comercialización y uso de estas sustancias activas y sus productos formulados.
A partir de esa fecha, se producirá la baja automática de los productos en el Registro Nacional de Terapéutica Vegetal a cargo de la Dirección Nacional de Agroquímicos, Productos Veterinarios y Alimentos del SENASA.
Se exceptúa de esta prohibición a la formulación en gránulos de Carbofuran al 10%, con aptitud nematicida, utilizados en cultivos de papas y ajos.
Estas medidas fueron adoptadas debido a que existe una creciente preocupación a nivel internacional por la producción, uso y comercialización de productos que podrían poner en grave riesgo la salud del ser humano y el medio ambiente y por lo tanto corresponde extremar las medidas para evitar su comercialización y uso, concretando regulaciones y acciones preventivas.